Enfrentarse a una pared blanca no es tarea fácil y como todo en la vida es clave planificarlo: ¿cuánto dinero nos queremos o podemos gastar? ¿Qué aspecto le queremos dar? ¿Buscamos tan solo un lavado de cara o una transformación radical?
El cómo elijamos decorar las paredes de nuestra casa dice mucho de nuestra personalidad. Además, que decorarlas es una forma de dar vida a cada estancia, ¿no crees?
Elegir o modificar tan solo un pequeño aspecto en la decoración de paredes transforma por completo una estancia: un toque de color, materiales diferentes, nuevas texturas o incluso incluir complementos (como pueden ser espejos, cuadros o láminas) son tan solo algunas de las opciones que existen para poder conferir el aspecto que buscamos en nuestro hogar.
Por eso, si lo que buscas es saber cómo dar encanto a tus paredes, quédate a leer nuestros 5 consejos para que sea todo un éxito.
Los espejos como protagonistas
Los espejos son los mejores amigos del espacio, por lo que, si decides elegir este elemento como protagonista, será el protagonista de tu salón. Y, por si fuera poco, mientras que las láminas o los cuadros absorben la luz, los espejos la reflejan dando una sensación de amplitud a la estancia. Sin duda, son elementos muy útiles y versátiles con los que debemos contar en casa.
Ahora, lo más importante de ello es saber escoger el más adecuado. ¿Cómo? Teniendo en cuenta el tamaño de la estancia a decorar, debemos elegir el tamaño, forma y diseño del espejo. Puedes elegir colgarlo, colocarlo encima del mueble de la entrada, … Hay un sinfín de posibilidades y en Clikalia te ofrecemos todas las opciones para que optes por la que se adecúe mejor a lo que buscas.
Por ejemplo, en un baño pequeño, lo mejor sería contar con un espejo grande para poder dar una mayor sensación de amplitud a la estancia. En una habitación, se recomienda utilizar uno de cuerpo entero con el fin de buscar una mayor profundidad visual…
Papel pintado
El papel pintado permite darle a una estancia cierto carácter y un aspecto exclusivo. Normalmente se utiliza para separar ambientes, destacar una pared o incluso crear efectos ópticos.
Es la opción perfecta si buscas armonía, dinamismo y personalidad en una estancia. Dependiendo del estilo o del diseño elegido, la habitación dónde lo vayas a colocar va a tener más espacio, tendrá un toque más elegante o incluso más acogedora.
En nuestra humilde opinión, aunque sea una opción sencilla por su fácil colocación, puede tratarse de la más difícil de elegir por la cantidad de combinaciones que existen: colores, motivos y estampados… ¡Es todo un arte saber qué es lo quedará mejor en nuestro salón, así que si lo sabes, ¡enhorabuena!
Paredes con texturas
Suele ser algo que aterroriza a algunos, sin embargo, nos parece una de las soluciones más destacables para darle vida a una estancia ya que transmite sensaciones: apetece verlo con detalle o incluso tocarlo.
Se trata de un método embellecedor y se puede emplear de muchas formas: pastas, selladores, paneles o incluso con pintura texturizada.
Sea cual sea, la opción que elijas, debes tener en cuenta que para añadirle textura a una pared es necesario verificar su estado primero. Tras reparar los daños, puedes empezar a buscar la combinación perfecta: piedra y madera, piedra y ladrillo, mármol con color u otra opción que se camufle más con la estancia que quieres modificar.
Además, con este tipo de decoración podrás ocultar imperfecciones, reducir ruidos o mantener la temperatura del inmueble. Es, sin duda, una solución camaleónica.
Murales con fotos, siempre serán tendencia
Cubrir de recuerdos las paredes de tu casa, la convierte todavía más en hogar y los murales de fotos son la solución. Es una obra de arte que tendrás en tu salón y ¡que puedes crear tu con tus propias manos!
Se trata de una decoración que puede ocupar toda la pared o bien tan solo una parte, una zona o una franja de la estancia. Por otro lado, es algo que podemos trabajar de varias formas: intercalándolas con citas, que se entrelacen sin que haya espacio entre unas y otras o incluso creando una forma irregular.
¿Eligirías esta forma de decorar?
Un cuadro que impacte
Es un ejemplo que demuestra que menos, es más. Un cuadro grande, tanto si es minimalista o una obra de arte con personalidad, es suficiente para volver a traer vida a una habitación sin color. Es una pieza que se puede fundir perfectamente con el tono de la pared en cuestión y destacar.
Cada consejo que te damos será un auténtico imán para la vista así que ahora te toca a ti ponerlo en práctica. ¡A partir de ahora todas las estancias de tu casa serán un auténtico mimo!
